Salmos 143:2-4

2 No llames ajuicio a tu siervo, pues ningún hombre vivo es inocente frente a ti.

3 El enemigo me persigue a muerte, me machaca vivo contra el suelo, me confina a las tinieblas, como a los muertos de antaño.

4 Mi aliento desfallece, mi corazón dentro de mí está yerto.