Levítico 13:29-31

29 Cuando a un hombre o a una mujer se le produzca una afección en la cabeza o en la barba,

30 el sacerdote examinará la afección; si observa que está hundida y que el pelo se ha vuelto amarillo y ralo, el sacerdote lo declarará impuro: es un caso de sarna, afección de la cabeza o la barba.

31 Pero si, al examinar la sarna, el sacerdote ve que, aunque la piel no aparece hundida, ya no le queda pelo negro, aislará al enfermo durante siete días.