Jueces 16:8-10

8 Los príncipes filisteos le llevaron a Dalila siete cuerdas humedecidas, sin dejarlas secar, y lo ató con ellas.

9 Se apostaron al acecho en la alcoba, y ella gritó: ¡Sansón, los filisteos! El rompió las cuerdas como se rompe un cordón de estopa chamuscada, y no se supo el secreto de su fuerza.

10 Dalila se le quejó: Vaya, me has engañado; me has dicho una mentira. Anda, dime cómo se te puede sujetar.