Jeremías 30:13-15

13 No hay quien defienda tu causa; no hay remedio para tu mal ni sanidad para tu enfermedad.

14 Todos tus amantes te han olvidado; ya no se ocupan de ti. Por causa de tu enorme iniquidad, y por tus muchos pecados, te he golpeado, te he corregido, como lo haría un adversario cruel.

15 ¿Por qué te quejas de tus heridas, si tu dolor es incurable? y por tus muchos pecados, yo te he tratado así.