Proverbios 26:8-10

8 Honrar a un necio es tan absurdo como atar la piedra a la honda.

9 Un proverbio en boca de un necio es como una rama espinosa agitada por un borracho.

10 El patrón que contrata a un necio o a cualquiera que pasa es como un arquero que lanza su flecha al azar.