Jeremías 30:10-12

10 »Así que no temas, Jacob, mi siervo; no te dejes abatir, Israel —dice el SEÑOR—. Pues desde tierras lejanas los traeré de regreso a casa, y sus hijos regresarán del destierro. Israel regresará a una vida de paz y tranquilidad, y nadie lo atemorizará.

11 Yo estoy contigo y te salvaré —dice el SEÑOR—. Destruiré por completo a las naciones entre las cuales te esparcí, pero a ti no te destruiré por completo. Te disciplinaré, pero con justicia; no puedo dejarte sin castigo».

12 Esto dice el SEÑOR: «Tu lesión es incurable, una herida terrible.