Isaías 40:8-10

8 La hierba se seca y se marchita la flor, mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre».

9 Súbete sobre un monte alto, anunciadora de Sión; levanta con fuerza tu voz, anunciadora de Jerusalén. ¡Levántala sin temor! Di a las ciudades de Judá: «¡Ved aquí al Dios vuestro!».

10 He aquí que Jehová el Señor vendrá con poder, y su brazo dominará; he aquí que su recompensa viene con él y su paga delante de su rostro.