Salmos 140:8-10

8 Yahvé, Señor mío, mi fuerza salvadora, tú proteges mi cabeza el día del combate.

9 No concedas, Yahvé, su deseo al malvado, no dejes que su plan se realice. Los que me asedian alzan

10 su cabeza: [Pausa.] ¡que los ahogue la malicia de sus labios,