Jeremías 14:3-5

3 Sus nobles mandaban a los pequeños por agua: llegaban a los aljibes y no la encontraban; volvían con sus cántaros vacíos. Quedaban confundidos y avergonzados y se cubrían la cabeza.

4 El suelo está consternado por no haber lluvia en la tierra. Confusos andan los labriegos, se han cubierto la cabeza.

5 Hasta la cierva en el campo parió y abandonó a su cría, porque no había césped.